Las elecciones se pueden venir en cualquier momento y, a pesar de la crisis económica actual, se desdoblarían las de Entre Ríos. Los motivos pueden ser muchos, pero dejemos eso de lado y vamos a lo local.
Actualmente hay solo cuatro candidatos "oficializados",y curiosamente varias fracciones de la política local aún no han presentado a nadie, a pesar de que quizás ya los tengan "a mano".
Ahora bien, analicemos un poco cada uno de ellos... empezando por el oficialismo.
Miriam Lambert tiene experiencia política siempre en la parte gobernante, no como opositora inactiva ni desde las bases, dado que comienza su carrera cuando Mariano Rebord gana la intendencia en 2011 y ella pasa de cumplir funciones de Enfermera e Instrumentadora Quirúrgica del Hospital San Benjamín directamente a la Secretaría de Acción Social del municipio. Cumplió su función durante cuatro años (2011/2015) y se postuló para Diputada provincial por el departamento Colón, función que está cumpliendo actualmente, hasta el 2019. Se postula como candidata desde hace algunos meses ya, pero la campaña política y la tarea que lleva a cabo como diputada deja mucho que desear. Una cuestión no menos importante es que la gente en general está cansada de la política del actual intendente -su esposo- lo que genera un contrapeso a la hora de elegir en las urnas, lo que puede significar una derrota, quizás hasta aplastante, a pesar de la metodología de campaña en la cual utiliza el miedo de las personas a perder los trabajos o favores políticos. Intenta convencer a la ciudadanía con proyectos que nada tienen que ver con la realidad, seduciendo con su personalidad suave y tierna mientras tiene la mentira al alcance de la mano. Tiene a su alrededor un grupo de personas que colaboran con la campaña, quienes en realidad luchan por la permanencia de cuatro años más en el "poder" y no realmente por trabajar en pos de una ciudad un poco mejor.
José Luis Walser comienza su carrera política "activa" en 2015 cuando es electo Concejal por el Vecinalismo Colonense, acompañando la candidatura a la intendencia de Mauro Godein. La carrera no ha sido demasiado fructífera desde el punto de vista político, y una de las cuestiones criticables es que, al mantener su trabajo privado sumado a la concejalía, no ha dedicado estos tres años a demasiadas cuestiones vinculadas con su cargo electivo. Los proyectos presentados han sido varios, en su mayoría pedido de informes al DEM y pedidos de obras públicas. Arregla su candidatura con Remiro Favre de origen radical, buscando la unión entre este partido con el vecinalismo, sin demasiada suerte, lo que genera una división en la misma UCR. Desde el punto de vista de varias personas con más experiencia política a quienes consultamos, Walser no tiene virtudes de Intendente, dado que su personalidad así lo indica: busca más quedar bien con todos y no en la toma de decisiones aunque tenga un costo político, lo que indica una personalidad hasta cierto punto poco convincente. Intenta llegar a la gente mostrando su relación con entidades religiosas, lo que puede generarle votos en la urna pero no un seguimiento final a la hora de gobernar.
Marín Jáuregui tiene amplia experiencia en la política. Iniciando desde la Juventud Radical llegando a ser Presidente de esta linea, cumpliendo algunas funciones durante la primera gobernación de Sergio Montiel. Luego se fué a Concordia donde estableció una alianza con Jorge P. Busti (tres veces gobernador y dos intendencias en Concordia), Durante el año 2012, la esposa de Martín Jáuregui ocupaba una banca el el Concejo Deliberante concordiense y fue expulsada del FEF (Frente Entrerriano Federal) dado que el Dr. Jáuregui había establecido relaciones con Hermes Binner (ex gobernador de Santa Fe, socialista). En el año 2013 era presidente del Partido Socialista de Concordia, pensando ya en las elecciones del 2015. Hoy, ya vuelto al radicalismo, es el exponente de una de las líneas radicales bajo la cual es precandidato a intendente en 2019, por Cambiemos. El nombre viene perfecto, dado los diversos cambios de "ideología" política a lo largo de los años y su personalidad es por momentos convincente y en otros algo chocante y prepotente.
Gerardo Gallo comienza su carrera política desempeñado el cargo de Secretario de Gobierno durante la intendencia de Mariano Rebord en el período 2011/2015. No hay mucha historia o experiencia política detrás de él, más que haber sido funcionario de quien hoy pretende derrotar en las elecciones, durante cuatro años. Su personalidad deja en claro su inexperiencia en el ámbito político ejecutivo y su relación anterior con el actual gobierno puede jugarle en contra al momento de las votaciones.
Como vemos, es lo que tenemos hoy. Lo que es claro es que ninguno -NINGUNO- de los candidatos ha presentado un plan de acción, proyectos o algún tipo de estudio previo de la situación de la ciudad. Esto delata por sí solo que el interés no es solucionar las cosas en serio, sino llegar para desbancar lo que hay hoy en el poder y tomarlo por cuatro años esgrimiendo tres de los cuatro candidatos el "deseo del cambio".
Esperemos ver, un tiempo antes de las elecciones, qué dice cada uno de ellos y que promesas creíbles -que tampoco hay- enarbolan para que la gente decida elegirlos.
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