Renuncia eleccionaria - Yo Opino

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sábado, 28 de octubre de 2017

Renuncia eleccionaria

(O aceptar los propios errores)

Después de las elecciones, si el oficialismo pierde, muchos funcionarios políticos renuncian. Nunca lo entendí demasiado, pero es una cuestión de "imagen", digamos, porque se toma como una afirmación que si un gobierno pierde las elecciones, es porque sus funcionarios no han tenido un buen desenvolvimiento en sus funciones.

Lo curioso es que, dentro de estas elecciones pasadas, que fueron legislativas a nivel nacional, sobre todo en nuestra provincia, el oficialismo perdió en casi todos los departamentos y, obviamente, a nivel provincial. Pero lo que marcó el resultado fue, además de 3 diputados para cambiemos y 2 para el justicialismo, es que la gente ya se cansó y, además, la "rueda de los 12 rayos" (ciclo de 12 años) ya dió la vuelta.

Ahora bien, si nos ponemos a ver los resultados oficiales (resultados.gob.ar) vemos que a nivel provincial Cambiemos obtuvo un 52.97% mientras que el Frente Justicialista llegó al 37.98%, lo que marca una diferencia de 14.99%. Pues bien, a nivel provincial, renunciaron más de 20 funcionarios, uno de los cuales fue el hijo del ex gobernador Urribarri -quien por cierto no renunció por sus vinculaciones con el mundo del narcotráfico, ni por los señalamientos con el mundo de la trata de mujeres y prostitución ni por vergüenza que su padre lo haya dejado ahí sin ningún mérito propio, sino por las elecciones-, Panozzo (CGE)... y muchos más. El recambio fue inmediato.

Pero si miramos los resultados en el departamento Colón, vemos que Cambiemos tuvo un 55.39%, y el Frente Justicialista un 36.11%, lo que marca una diferencia de 19.28%, superior a la provincial y en nuestra ciudad, si seguimos con las cuestiones de renuncia, aún no se fue nadie, lo que nos hace pensar que aquí no se ha tratado de ver las cosas como son, el freno de la gente para la política y el no reconocimiento de los resultados tal y como salieron.

Y no se trata de pedir la renuncia de nadie (o quizás sí), sino que de una vez por todas se den cuenta que la política no es solo hablar en un micrófono alquilado, sino hacer las cosas que deben hacer por el bien público. O a lo mejor sí haría falta que renuncien, pero para eso hace falta un cambio fundamental: la forma de pensar del elegido, dándose cuenta que en realidad él es la "figura" del álbum, pero se llena con el resto. Y ese "resto" de figuritas, ya están gastadas y han demostrado el uso de la política para el progreso tanto en lo personal como en lo político.

Gente capacitada sin dudas hay y mucha. El tema es que los dejen demostrar su capacidad. Y la principal capacidad es la de pensar en quienes lo puso donde está y que, a pesar de todo, aún lo mantiene. Apenas con finos hilos, pero lo mantiene.

Quizás sería bueno que el funcionario que no esté de acuerdo con las cosas que pasan, por decisión propia renuncie, sin tener que esperar las elecciones. En ese momento el jefe se dará cuenta de lo que pasa en realidad. Mientras tanto hará falta una elección más, pero para eso falta mucho y los manotazos de ahogado político pueden llegar a exponer muchas cosas hoy apenas cubiertas con una delgada cortina oscura.

Lucas M. Beber
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