Todos sabemos ya lo que pasó en los últimos 4 años del anterior intendente Mariano Rebord, y también sabemos que está pasando ahora con José Luis Walser que, después de un año y meses, lleva una gestión poco menos que mediocre, al menos por ahora.
Tenemos dos panoramas: uno manejado por un hombre de amplia experiencia política y social que no dejó obras de envergadura para Colón (sólo cascarones vacíos sin demasiada significancia social). Sí podemos reconocer que este personaje tiene algo que los demás carecen: carisma. Y el segundo, un hombre joven (casi pichón político) con ganas de "atropellar para solucionar" lo que tanto criticó durante sus cuatro años como concejal y que ahora parece desconocer con una falta total de experiencia política y social, y que no tiene algo fundamental: carisma.
Con una mirada retrospectiva vemos que en realidad Walser no ganó las elecciones del 2019, sino que las perdió la entonces candidata Miriam Lambert (ex diputada que apenas "medía" electoralmente y actual empleada de la HCD), vale decir que el voto que obtuvo Walser fue un voto castigo a Rebord (hoy diputado) que terminó pagando Lambert aunque el premio consuelo ya está ganado: gana lo mismo que el intendente sin necesidad de hacer nada.
Si pudiéramos levantar un poco la mirada para intentar ver que nos depara dentro de relativamente poco tiempo, tenemos tres posibles escenarios: el primero, la reelección del actual intendente Walser para lo que -obviamente- deberá obrar un majestuoso milagro gestionado por parte de las dos iglesias que apoyaron su campaña o bien que un ángel (caído de quien sabe donde) lo ilumine para hacerlo entender que las cosas que está haciendo en realidad no sirven. La única herramienta que hoy tiene es que apareció la pandemia, la "caja" vacía y la ciudad está detonada. Y tiene razón.
El segundo escenario es la vuelta de Rebord, lo cual sería casi una paradoja temporal provocada por algunas líneas de tiempo y espacio que no funcionan demasiado bien y que logran posicionarlo nuevamente en ese lugar. Su retorno es casi imposible -a pesar de la campaña que pueda hacer- dado que la gente últimamente tiene buena memoria (ayudamos a eso). Pero claro, juega con algo a su favor: no hay nadie que pueda o quiera hacer lo contrario, vale decir que estaría jugando un partido de futbol contra el aire. Y la herramienta que puede usar es que la gestión de Walser no hizo nada, y tiene razón.
Y el tercero es la posible aparición de una figura que hoy por hoy no existe. Por otra parte, quedó demostrado en las elecciones pasadas que candidatos como Gallo, Etchevarne, Jauregui, Battista, Fernández y Lambert ya no tienen cabida dentro de la política local porque es más de lo mismo: el que no arregló antes lo hizo después y eso deja marcas en el consciente colectivo de la gente (además de nuestro archivo, claro).
Entonces, dados estos dos primeros escenarios, el tercero está por verse. Pero el problema es encontrar alguien que sea que se anime a enfrentar a estos dos candidatos ya anotados (Rebord y Walser) pero no hay. Al menos no por ahora.
Una cuestión a tener en cuenta para las próximas elecciones: la ley provincial 10.844 que reglamenta el artículo 17 de la Constitución de la Provincia, relacionado a la paridad de género, y en su artículo 3 expresa claramente que la representación deberá ser igualitaria "de varones y mujeres en un 50% para cada género en la conformación de listas electorales...". Y esto va a ser un detonante a la hora de armar las listas, porque en caso de postularse Rebord y Walser, deberán tener una mujer como vice... y hoy no vemos una figura femenina preponderante en el ámbito público político local, lo que no significa que no la haya, claro.
Claramente esta situación podrá disparar algún fusible (o varios) a la hora de armar las listas, dado que la fórmula para Walser deberá ser lo suficientemente fuerte como para "garantizar" una reelección, y para Rebord lo mismo para su "vuelta", cuestiones que podrían llegar a generar apuestas por los nombres llegado el momento.
Otro dato no menos importante es que los intendentes a sido "puestos" históricamente por la franja comercial y turística: tenemos el caso por ejemplo del apoyo total del CeCom a Mariano Rebord en 2011, juntamente con las distintas instituciones vinculadas al turismo. Este apoyo se repitió en 2015 pero ya no en 2019, que en ese momento lo tuvo Walser (sumado a las iglesias) y que hoy cogobierna, dejando en manos de la iglesia un sector político clave como Acción Social (actualmente Desarrollo Comunitario) y otros como la vinculación con instituciones en manos de personas vinculadas al sector comercial.
Ya se habla de reuniones políticas entre Adami y Rebord, lo que marcaría que el aparato político y económico peronista que tiene Rebord aún está "aceitado", mientras que el de Walser ni siquiera existe, y depende de la mano de quienes lo apoyaron para que hoy esté donde está, lo que indica claramente que de apartarse esos sectores, la caída sería estrepitosa. Pero también tenemos la posibilidad que el "candidato/a" sea puesto por la gobernación, lo que disputará una lucha de poderes entre Rebord y Santa Cruz que, de imponerse el "candidato/a" de Santa Cruz, Rebord podría armar otra línea del tipo "vecinal-peronista" y pelear por afuera, cosa que ya hizo en su momento.
Si las elecciones fueran hoy podríamos ver que Rebord no puede (o no debe) volver habida cuenta de la experiencia que tuvimos; Walser no puede quedarse por lo que estamos viendo hoy... y el "fantasma" -femenino o masculino- de una futura candidatura en la que se pueda creer, hoy no existe. Aunque si miramos internamente, la posición del "vecinalismo colonense" podría tener ribetes atractivos: imaginemos por un momento una candidatura de Vallory/Godein o de Campodónico/Minatta (Concejal), en el orden que quieran (intendente y vice)... Para alquilar balcones.
La pregunta: ¿aparecerá una mujer o un hombre capaz para poder cambiar una vez por todas Colón? ¿O deberemos conformarnos con lo mismo por el resto de la existencia?.
Una cosa es importante: la gente ya no es tonta. Y acá nos encargamos del resto.
#YoOpino
