Nuestra Constitución Nacional especifica que en el sistema democrático existen tres poderes "independientes": Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
Sin embargo, el presupuesto anual abarca a todos, incluso los sueldos de los otros poderes (legislativo y judicial). Es decir que, por más "independientes" que sean esos poderes, los "banca" el ejecutivo. No son autónomos.
Dentro de cada "poder" hay determinados escalafones, categorÃas o como quieras llamarlo. Entonces, es lógico que un empleado del Congreso o de Tribunales quiera ganar bien, pero la diferencia con quienes son "superiores" (diputados, senadores y jueces) es enorme. Sideral.
Habida cuenta del "poco aporte" que realizan los diputados y senadores nacionales y provinciales -no tanto los jueces-, el Ejecutivo deberÃa poner un lÃmite a las dietas y reducirlas a su mÃnima expresión, por ejemplo, al sueldo básico de un empleado público. Ellos (los diputados y senadores) no son seres especiales bajados del cielo para que merezcan un sueldo como el que ganan, disfrutando de eso y tantos otros beneficios que nadie tiene.
Obviamente, los concejales -al menos en nuestra ciudad- ganan casi $ 1 millón por mes para... ¿para que?.
Es hora que tanto el presidente, gobernadores e intendentes vean estas cosas, emitan un DNU o lo que sea, para que todos estos "humanos iluminados" pisen la tierra de una vez por todas y sean uno más de nosotros, y que realmente sea un honor ocupar cargos como esos.
