por Beatriz Saravia
Otra vez hay sospechas de corrupción en la gestión del actual intendente.
Veamos, la causa de la pileta del parque, los innumerables cuestionamientos de familiares en cargos políticos, varios casos de persecución política, las eternas cuentas que no dan en las fiestas de la Artesanía luego de eliminar el sistema que había antes, porque supuestamente no funcionaba.
Como olvidar el enorme manto de silencio por lo sucedido con uno de los funcionarios a cargo de inspección y varios sectores más.
Ahora se suma otra denuncia por irregularidades. Lo peor es que ni siquiera se han tomado el trabajo de intentar disimular un poco. Eso señoras y señores, se llama IMPUNIDAD.
Aunque hay algo mucho más preocupante, el silencio del Radicalismo, quien se ha jactado de ser siempre la reserva moral de la política.
El silencio de sus dirigentes, de su presidente, el silencio de los concejales, del Senador Favre y del Diputado Godein, que ahora ha vuelto al Comité.
IMPUNIDAD Y SILENCIO CÓMPLICE. Y pensar que los colonenses en algún momento votamos esto para erradicar exactamente lo mismo de los anteriores.
